Quindío hizo el milagro en el Atanasio Girardot de Medellín en una noche brillante que desde el incio ya se presagiaba lo que iba a ser la victoria de los cafeteros, transcurrían apenas los ocho minutos después del pitazo inicial y el volante John valoy puso a celebrar a la escuadra milagrosa con la primera anotación que le daba el triunfo parcial, un Quindío que nunca se canso de atacar a su rival y que le jugo de tu a tu en un primer tiempo colmado de llegadas de ambos mandos en los arcos rivales, Medellín pese a que trato de encontar la paridad en la primera parte lo hizo desarrollando su tarea de forma desordenada y el Quindío se supo defender de las ráfagas de la delantera poderosa.
Un primer tiempo electrizante con muchas emociones y con un cuadro cuyabro inspirado porque la noche era verde, el planteamiento del Quindío cambio después de la anotación y se resguardo en defensa creándole difiultades a los volantes y delanteros del Independiente Medelín, se mostró lucha y ganas por los locales ante una impecable actuación de los defensas cafeteros.
El segundo tiempo, acompañado de lluvia, mostró otra faceta del Poderoso que con más ganas que argumentos logró la paridad después de mucho luchar. Ya habían transcurrido 86 minutos cuando Mosquera se inspiró y, de media distancia, venció al arquero Óscar Meza (ingresó tras la lesión de Alejando Otero a los 33’) que se había convertido en figura.Ese golazo del exjugador del Quindío recuperó la fe de los hinchas escarlatas, que infortunadamente pudieron degustar poco tiempo el regalo del 10. Tres minutos después, aprovechando que el DIM jugaba sin su central David Rancan, expulsado por doble amarilla, y por el centro armó el 2-1 definitivo que concluyó Andrés Formento, para cerrar una noche fría y oscura del equipo paisa que perdió el partido, el liderato y dos hombres (también expulsaron a Leiton Jiménez) para del duelo del fin de semana ante el Pereira.